...recuerdos de aquel niño que leía los libros de Gil Pérez en el viejo sillón de La Vega, aquellos recortes amarillos en el armario, aquellas tardes en la fría piedra del estadio, aquellos sueños, pensamientos y deseos que tuve desde aquella grada que fue mía, DESDE MI GRADA VIEJA...

lunes, 2 de abril de 2012

La mirada del adiós

“Cuando me di vuelta ya no estabas,
yo sólo buscaba la mirada del adiós…”
“La mirada del adiós”. Buena Suerte (1991). Los Rodríguez.


Cada vez que en mis pensamientos imagino despedidas, suenan desde hace años los acordes de aquella vieja canción escrita por Calamaro y Rot en forma de banda sonora del momento.
Desgraciadamente y muy a mi pesar ayer a la salida del Helmántico tocó de nuevo.
Desde que se inició el día; de vuelta en Salamanca con la familia, de vacaciones y sabiendo desde hace meses que el Domingo de Ramos la Unión jugaría en casa y podría verla; tuve la sensación de que aquella tarde de fútbol que iba a pasar en el Helmántico podría ser la última de tantas que pasé con los chavales a lo largo de mi vida; pues por circunstancias de lugar de residencia habitual, esta sería la última jornada de la temporada en que podría ver a mi Unión a pesar de faltar varios partidos para la conclusión de la temporada.

No quiero volver a pensar en esta mañana de lunes, que todas aquellas sensaciones que poblaron mi mente desde que salimos de casa para buscar el coche, hasta que llegamos al estadio y finalmente volvimos con un pobre 0-0, se confirmen como aquella película de recuerdos que brotaron en mi durante todo el día, como epílogo de mis visitas al Helmántico durante toda una vida.

Pero hoy, como en los últimos tiempos, en la incertidumbre de un futuro oscuro, casi negro, con la posibilidad, no remota, de ni siquiera salir a competir el año que viene; tengo  que reconocer que cuando el pitido final se hizo dueño del momento y bajé con mi padre la grada de fondo sur en busca de la salida; aquella canción, sonó de fondo, y en el borde de la rampa de la puerta que deshace el camino desde el estadio, girándome busqué su mirada; la del adiós; porque desgraciadamente, y no quiero; ayer tuve la sensación, triste, muy triste, de que a lo peor, no volvería a verla…


1 comentario:

  1. A mi me pasó algo parecido, a eso añade la irritación por escuchar los pitidos de algunos aficionados al pésimo partido ¿alguien sabe que estos jugadores llevan 3 meses sin cobrar y que si mañana quisieran terminarían con nuestro club directamente? ¿no deberíamos remar para que aguanten lo máximo posible? en fin, confio en que salgamos el año que viene, como sea, hala union!

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